martes, 13 de julio de 2010

ÁNGELUS. Poema


Oleo de Chrystian Guttiérrez

ÁNGELUS

Quién pudiera aprender los largos versos
que saben las oscuras golondrinas;
ellas retornan al oír el canto
de lo que fue un lejano Ave María.

Quién dijera de pronto al recordarme:
delante de una lámpara encendida
dejaba en cada línea de papel
los versos que las páginas perdían.

Solía al ver crecidas su melena,
su lágrima y su uña andar sombría.
Y le han crecido por andarse triste
en vez de cualquier cosa, margaritas.

Y que se diga un dulce cuento al niño:
bajó la muerte a ella cierto día
en que la lluvia se volvió una gota
sobre la rosa que perdió la vida.



Estimada Delfina, me ha encantado su poema, por su belleza plástica y porque rebosa humanidad. Me han gustado especialmente esos dos versos que tanto dicen: "dejaba en cada línea de papel/ los versos que las páginas perdían.", y es también admirable ese final donde vida y muerte se encuentran, perso sin combatirse, con naturalidad y esperanza-porque donde está la balleza artística, ahí reside siempre, despierta y cálida, la esperanza-. El ritmo de este poema junto a su contenido transmite una gran sensación de belleza y serenidad.

David Rey Fernández